Cafeteando con mi amigo Periko sobre el desastre de la central nuclear de Fukushima (Japón), me recomendó no dejar de ver la reedición próxima de un documental sobre lo que paso en la central nuclear de Chernóbil (Ucrania), en su día la más grande de Europa, el 26 de abril de 1986. Casualmente le emitieron por el canal cuatro y le pude ver, quedando tan impresionado, que quiero contar en unas breves líneas algunos hechos que cuentan que pasaron el fatídico día que el reactor 4 de la central nuclear exploto. Como casi siempre la mano del hombre y su falta de escrúpulos precipitaron a miles de personas a una muerte segura.
El 26 de abril de 1986 se realizaron una serie de pruebas controladas de corte de suministro eléctrico en la central, inesperadamente y como consecuencia de ello, empiezan una serie de fallos en los controles. Los tres ingenieros al cargo, pudieron en ese momento abortar el simulacro pero decidieron no hacerlo pensando en la recuperación del sistema y los fallos continuaron concatenándose, llegando un momento en que no se pudo dar marcha atrás. Se provoco una explosión en el reactor 4 que reventó la tapa de 1.200 toneladas que lo cubría facilitando la salida de 8 toneladas de material radiactivo (uranio y grafito) 1 Km hacia arriba y la posterior caída de la llamada lluvia radioactiva.
A soldados y campesinos en un primer momento no se les contó la verdad y creyeron ir solamente para apagar un incendio, por lo que acudieron en mangas de camisa. Posteriormente se hace necesario desescombrar el tejado y meter todos los restos altamente radioactivos en el interior del reactor para poder construir un sarcófago que impidiese la fuga radioactiva.
Las personas encargadas de realizar el trabajo y a las que se denomino LIQUIDADORES desconocían por completo los efectos de la radiactividad sobre el cuerpo humano. Fueron 700.000 hombres, los que en turnos de 3 minutos subieron al tejado para desescombrar en unas condiciones no compatibles con la vida y aun hoy no se puede explicar como resistieron con vida esos 3 minutos. Recogían el material radioactivo incluso con las manos desnudas. La acción de esos hombres evitó una segunda explosión que hubiera destruido media Europa y la hubiera dejado muchos años no apta para vivir.
A día de hoy pocos de ellos no han muerto o han sufrido enfermedades mortales. Incluso 3 de ellos tuvieron que bucear en agua completamente radioactiva para manipular unas compuertas. Los 3 voluntarios escogidos entre otros presentados, sabían de antemano que no volverían a salir de la piscina y aun así sacrificaron sus vidas.10 días estuvo saliendo radiación a la atmosfera, y mientras los niños siguieron jugando en los parques por el mutismo de las autoridades que tardaron 3 días en empezar la evacuación de los 60.000 habitantes de Chernóbil. 8.500 de los LIQUIDADORES murieron en los primeros meses y ni sus familiares se podían acercar a ellos por la radioactividad que despedían. Esa radioactividad durara en la zona 24.000 años. El sarcófago construido para tapar el reactor tiene una duración de 30 años que cumplen próximamente y ya se está empezando a resquebrajar, con el riesgo de la entrada de agua al interior y la posibilidad de una nueva reacción en cadena.
A soldados y campesinos en un primer momento no se les contó la verdad y creyeron ir solamente para apagar un incendio, por lo que acudieron en mangas de camisa. Posteriormente se hace necesario desescombrar el tejado y meter todos los restos altamente radioactivos en el interior del reactor para poder construir un sarcófago que impidiese la fuga radioactiva.
Las personas encargadas de realizar el trabajo y a las que se denomino LIQUIDADORES desconocían por completo los efectos de la radiactividad sobre el cuerpo humano. Fueron 700.000 hombres, los que en turnos de 3 minutos subieron al tejado para desescombrar en unas condiciones no compatibles con la vida y aun hoy no se puede explicar como resistieron con vida esos 3 minutos. Recogían el material radioactivo incluso con las manos desnudas. La acción de esos hombres evitó una segunda explosión que hubiera destruido media Europa y la hubiera dejado muchos años no apta para vivir.
A día de hoy pocos de ellos no han muerto o han sufrido enfermedades mortales. Incluso 3 de ellos tuvieron que bucear en agua completamente radioactiva para manipular unas compuertas. Los 3 voluntarios escogidos entre otros presentados, sabían de antemano que no volverían a salir de la piscina y aun así sacrificaron sus vidas.10 días estuvo saliendo radiación a la atmosfera, y mientras los niños siguieron jugando en los parques por el mutismo de las autoridades que tardaron 3 días en empezar la evacuación de los 60.000 habitantes de Chernóbil. 8.500 de los LIQUIDADORES murieron en los primeros meses y ni sus familiares se podían acercar a ellos por la radioactividad que despedían. Esa radioactividad durara en la zona 24.000 años. El sarcófago construido para tapar el reactor tiene una duración de 30 años que cumplen próximamente y ya se está empezando a resquebrajar, con el riesgo de la entrada de agua al interior y la posibilidad de una nueva reacción en cadena.
400 Personas han retornado para vivir en el área de la explosión, siendo la mayoría de edad avanzada y no creyentes en los efectos de la radioactividad y que curiosamente están sanos, por el contrario las personas que no han retornado continúan desarrollando enfermedades y malformaciones, en lo que puede ser un ejemplo de la fuerza de la mente sobre la materia.
Las familias de los LIQUIDADORES a día de hoy siguen esperando la casa de campo que el estado les prometió.
Sirvan estas líneas para recordar a esos más que valientes LIQUIDADORES y esperemos que tragedias como esta no vuelvan a suceder, aunque poco parece que hemos aprendido y la central de Fukushima en Japón, es un ejemplo de ello.
El sábado día 9 de abril en la TVE 2 echaron un reportaje sobre Chernobil en relación con el aniversario de la explosión de uno de los reactores nucleares.
ResponderEliminarEl fallo se produjo al realizar un simulacro en el que las turbinas de refrigeración en caso de apagón electrico debían de funcionar al aprovechar el vapor producido por el calor del reactor pero esto no sucedió y explotó.
Lo lamentable fue la falta de información y engaño por parte de los técnicos a los ciudadanos sobre la contaminación radiactiva, no solo en Rusia sino sobre el resto de los países a los que llegó la nube radiactiva.
Hemos de dar las gracias a los mineros, militares que dieron su vida por tapar y limpiar "entre comillas" la Central de Cernobil para la construcción del sarcófago con el fin de evitar la salida de más radiación.
Respeto y recapacitación sobre los ciudadanos en especial niños a los que les ha afectado y afectará a sus proximas generaciones debido a las alteraciones radiactivas sobre su cuerpo